La Luna

Mazo: Marsella

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Un periodo de confusión y oscuridad del que debe salir. Arrancarse del pasado y mirar al futuro, necesidad de cambiar y renovarse. Enfrentarse a los problemas, para restablecer el orden natural, a pesar del miedo.

Puede que estés en un periodo donde tus emociones afloren con mayor facilidad, pues esta carta indica los sueños, lo oculto, la parte femenina de todo ser humano que se hace presente en esta etapa. Lo mejor que puedes hacer es exteriorizar tus emociones de la manera más natural y ecuánime posible. No temas al dolor y disfruta la alegría con intensidad. Esta carta representa también a los enemigos secretos, así que hazle caso a tu intuición, sobre todo en los negocios.,

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Descripción ampliada

Es la segunda de las cartas astrales que aparece en el Tarot, y tiene la particularidad de ostentar el mismo nombre en todas las barajas, así como la misma descripción en las modernas. Habría que remontarse a los mazos anteriores al de Bembo para encontrar representada a una diosa, posiblemente Diana, que portaba en su mano la Luna y que se encontraba suspendida sobre su mitológica jauría de perros. Posteriormente se dio una variante, en la que aparecían dibujados dos astrónomos en actitud de estudiar nuestro satélite.

Hoy en día podemos ver en todos los Tarots que sobre la Luna se pinta la cara de una mujer, quizás en recuerdo de la antigua diosa, ya que caen una especie de lágrimas multicolores invertidas, que pueden interpretarse como el rocío del que antiguamente se pensaba era llevado hacia arriba para que cayera después por intervención directa de la Luna. Sobre la tierra se encuentran dos animales que algunos identifican con perros, representantes de la naturaleza sojuzgada y sometida por el hombre; y un lobo simbolizando al animal en su expresión salvaje e indómita. Nos parece una idea muy artificial y sin base real, puesto que en la mayoría de las barajas no se aprecian detalles para apoyar esta interpretación. Más bien se trataría de una reminiscencia de la jauría de perros acompañantes de la diosa Diana y los custodios de la entrada y la salida del submundo. Tras estos animales aparecen dos edificaciones que se suelen asociar a las místicas Columnas de Hércules situadas en el estrecho de Gibraltar y que señalaban las entradas del Averno. A sus pies se observa una laguna, identificada por muchos con el mar Mediterráneo, donde se ve un crustáceo, que parece salir: de acuerdo con la interpretación esotérica sería un símbolo de la humanidad emergiendo del elemento primario agua, debiendo atravesar por los peligros de la vida, iluminada por la luz oscura de la Luna, para entrar en el reino de lo desconocido. Otros sólo ven un claro reflejo del signo de Cáncer, asociado en el Zodíaco con la Luna. La tradición popular afirma que al salir la Luna por el Poniente en dirección a Levante, lleva una trayectoria tan retrógrada como la de los cangrejos.

Se ha pretendido siempre que la Luna tiene una especial intervención en la actividad de la naturaleza, especialmente en las mareas, y sobre el comportamiento de ciertas especies animales, como las ostras, que se cierran a su paso, y los mismos perros, que manifiestan una marcada tendencia a aullar cuando aparece; así como sobre ciertas plantas, la artemisa, por ejemplo, que deriva su nombre de la diosa que los griegos asignaban a la Luna, y que poseyó una influencia enorme en los compuestos adivinatorios de la Edad Media, siempre que se recogiera durante determinadas fases lunares. También se pretende que la Luna rige la actividad humana: pese a los múltiples experimentos realizados en este sentido, no se ha determinado todavía su posible influencia; no obstante, nos seguimos refiriendo a los que consideramos menos cuerdos, como lunáticos.

Esta carta tiene un marcado carácter femenino, pero a efectos adivinatorios habría que considerarla como neutra, multiplicando los efectos de las que le acompañan y siendo de imposible interpretación por sí misma, en cuanto que su significado es el de incertidumbre, duda.

En sentido normal indica:

— Duda. Decepción. Engaño. Malos amigos. Calumnia. Enemigos secretos. Intuición. Imaginación. Viaje por mar.

En sentido inverso:

— Embustes. Confusión. Histeria.

Para el hombre indica inestabilidad, pesimismo y falta de confianza en sí mismo. Necesita de alguien que le señale el camino. Ama los viajes, pero es incapaz de organizados. En amor es un soñador, lo que le puede acarrear grandes sufrimientos. Suele engañar a los demás, pero siempre encuentra excusas para ello. Físicamente es un ser débil.

Para una mujer indica que se trata de un ser en exceso imaginativo, creyendo que sus deseos son realidades. Intuitiva, cambiante y frívola. Se muestra severa y autoritaria con quienes la rodean, a pesar de ser amable cuando lo desea.