Aunque la reflexología no sustituye a la consulta del médico, puede ser beneficiosa para virtualmente cualquier sistema fisiológico: óseo, nervioso, muscular, cardiovascular, circulatorio, linfático, respiratorio, digestivo, urinario, endocrino y reproductor, así como para los órganos de los sentidos. A menudo es la modalidad preferida para reducir el dolor, especialmente por lo que se refiere a dolor crónico o enfermedades terminales.
La investigación tradicional realizada sobre la reflexología ha confirmado sus poderes curativos. Por ejemplo, en 1993, la Universidad Médica de Beijing informó de un estudio realizado sobre 32 diabéticos que demostró que la reflexología podal era un tratamiento efectivo para la diabetes mellitus de tipo II.
Hay más de 10.000 casos documentados por médicos chinos que atestiguan la eficacia de la reflexología para tratar achaques que van desde resfriados y gripe hasta problemas cardiacos.
En 1992 se llevó a cabo un estudio en Dinamarca con los empleados de correos, en el que se les exigió someterse a tratamientos de reflexología al menos dos veces al mes. Al final del año, el absentismo laboral se había reducido en un 13,3 %.
Aunque son pocos los estudios formales estadounidenses realizados sobre los efectos de la reflexología, uno de ellos, dirigido por la Academia de Reflexología de Estados Unidos, con sede en Burbank, del que se informó en American Obstetrics and Gynaecology Journal, demostró casi un 50 % de reducción de los síntomas del síndrome premenstrual en un grupo de mujeres que se sometieron a tratamientos de reflexología.
Abundan los casos que describen los numerosos beneficios de la reflexología. Un reflexólogo experimentado puede ofrecer ayuda incluso en ciertas situaciones de primeros auxilios. Al trabajar sobre el reflejo de la pituitaria, en el centro del dedo gordo del pie, se ayuda a reanimar a una víctima desvanecida. Al trabajar el flexor sigmoideo del talón del pie izquierdo se beneficia a una víctima de un ataque cardiaco, cuyo ataque se ha desencadenado debido a una excesiva formación de gas en el colon. Los pacientes de cirugía tardan menos tiempo en curar cuando reciben tratamientos de reflexología antes y después de practicada la operación.