Cuando elija un programa de estudios, busque la recomendación de algunos reflexólogos y terapeutas que la hayan practicado con éxito; investigue el trasfondo del programa y de los profesionales que esté considerando y descubra desde cuándo practican y enseñan. Evalúe su programa de formación, el proceso de certificación y las calificaciones de ese profesional. ¿Hasta qué punto son fiables y exactos los materiales de formación, los libros y gráficos? ¿Enseña el programa a trabajar sistemas fisiológicos o se limita a indicar cómo «apretar botones» para las zonas afectadas del cuerpo? ¿Hasta qué punto son rigurosas las normas de certificación?
¿Cuáles son los criterios? ¿Supone pasar por pruebas escritas y prácticas? ¿Qué formación y calificaciones tienen los profesionales?
La duración del programa es otro indicador importante de credibilidad. Los reflexólogos están de acuerdo en que la magnitud de conocimientos y experiencia requerida para alcanzar la competencia implica seguir un programa que contenga aproximadamente unas 200 horas de clase, combinada con experiencia práctica y estudio en casa. En Estados Unidos, para obtener la certificación básica se necesita un mínimo de un año de experiencia.