En este asana el cuerpo toma la forma de un triángulo extendido y poporciona un inteso estiramiento del tronco y las piernas
Utthita proviene del sánscrito y significa extendido, tri significa tres y kona ángulo.
Esta postura fortalece los ligamentos y mejora la flexibilidad.
Inicie la postura desde tadasana, distribuyendo su peso en ambas piernas, los pies se tocan en el centro. Pise con todo el pie para tener buena base y no sobre talones o tobillos.
Mantenga su espalda derecha y su cabeza alineada en el centro de la columna.
Inhale profundamente y salte, abriendo las piernas en un paso largo, la extensión depende de cada persona, pero puede ser de 1,2 mts aproximadamente.
Levante sus brazos extendidos formando un ángulo de 90º con el tronco, con las palmas mirando hacia el suelo.
Gire su pierna derecha de forma que el pie derecho quede en 90º respecto del pie izquierdo. Es muy importante que el giro se produzca desde la articulación del fémur con la cadera, para que no se produzca dolor en la rodilla.
Extienda su brazo derecho hacia la pierna derecha, manteniendo en tronco en el mismo plano y apóyese en el suelo o en cubo de madera en el costado externo del pie derecho.
Salir de la postura flexionándose hacia la pierna sobre la que se esta inclinado para apoyarme sobre los músculos, no sobre los ligamentos.
Imprime un movimiento lateral a la columna, extiende las extremidades y el tronco.
Aumenta la longitud de las piernas, si se acortaron por algún accidente de caderas, muslos o pantorrillas.
Alivia los dolores lumbares y tortícolis.
Desarrolla el tórax.
Reduce la grasa de la cintura y la cadera.
Tonifica los nervios de la columna vertebral y los órganos abdominales.
Estimula los movimientos peristálticos.
Masajea los riñones.
No se sugiere realizar con nefritis.