Esoterismo alquímico de Hermes
Indiscutiblemente, el Hermes egipcio es, entre otras cosas, el padre del Arte Real o Alquimia. Esoterismo y hermetismo se funden de manera total a la hora de trabajar la Materia Prima.
De hecho, el esoterismo trata de despertar la intuición y la capacidad de evocación en el ser humano, y la alquimia no puede apartarse del mundo esotérico.
La Tabla de Esmeralda contiene los dos grandes principios de la filosofía esotérica o hermética. El primero es la unidad de la materia, ya quo todas las cosas se han formado a partir de «esta cosa única». El segundo, y no menos importante, es la unión del microcosmos (el hombre) con el macrocosmos (el universo), principio que viene expresado por la frase «Lo que está arriba es igual u lo que está abajo». Una doctrina que fundamenta artes esotéricas como pueden ser la astrología y la alquimia.
Hermes es por tanto, y sin lugar a dudas, la figura señera –si bien anclada en la bruma de lo impreciso– de la que partirá todo el universo esotérico.