Permanece quieto, sé puro; no fatigues tu cuerpo, no perturbes tu esencia vital, y vivirás por siempre.
Porque si los ojos no ven nada, y los oídos no oyen nada, y la mente no piensa nada, tu espíritu quedará en tu cuerpo, y el cuerpo vivirá entonces por siempre.
Estima lo que se halla dentro de ti. y apártate de lo que se halla fuera de él; porque demasiado conocimiento es una maldición.
Y recién entonces te llevaré al refugio de la Gran Luz para alcanzar la Meseta del Yang Absoluto. Te guiaré a través de la puerta de lo Desconocido Sombrío, a la Meseta del Ying Absoluto.
El Cielo y la Tierra tienen funciones separadas. El ying y el yang tienen sus raíces escondidas. Conserva cuidadosamente tu cuerpo, y las cosas materiales prosperarán por sí mismas.
Yo conservo el único original, y descanso en armonía con lo externo. Por lo tanto, he podido vivir durante doscientos años y mi cuerpo no ha envejecido.
El emperador Amarillo hizo otras dos profundas reverencias y dijo: -Kuangch'engtsé es, seguramente, Dios ...[ii]
-Ven -le dijo Kuangch'engtsé- te diré. Esa cosa es eterna; pero todos los hombres piensan que es mortal. Esa cosa es infinita: pero todos los hombres piensan que es finita. Los que poseen mi Tao son príncipes en esta vida y gobernantes en las que le suceden. Los que no poseen mi Tao contemplan la luz del día en esta vida y se transforman en trozos de tierra en las que le suceden.
Hoy en día, todas las cosas surgen del polvo y al polvo vuelven. Pero te guiaré a través de los portales de la Eternidad para que flotes en los grandes espacios del Infinito. Mi luz es la luz del Sol y de la Tierra. Mi vida es la Vida del Cielo y de la Tierra. Ante mí todo es nebuloso; detrás de mí todo es sombrío, desconocido. Todos los hombres podrán morir; pero yo viviré por siempre.