MI VISIÓN DEL TAROT

Jaime Hales

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Tarot Oráculo Asistémico

En esa línea, el Tarot juega un papel clave, pues es uno de los oráculos asistémicos más extendido y que permite mayor acercamiento con las personas, porque requiere de la participación del consultante para que el lector (mago) pueda producir la interpretación. El Tarot –no cualquier baraja que lleve ese nombre– es un mágico instrumento de la trascendencia puesto al servicio de los seres humanos para avanzar en su proceso de despertar interior y desarrollo pleno.

Los seres humanos, creados a imagen y semejanza de Dios, hemos recibido la propuesta de avanzar hacia la plenitud (Vida Eterna, Cielo) a través de sucesivos procesos de encarnación. En ese proceso, todo lo que tienda a conservar o recuperar la memoria profunda desde el interior de cada ser está ayudando en el cumplimiento de la ley de la Tarea y la ley del Cumplimiento y la Satisfacción. Si bien el universo es inconmensurable, me asiste el convencimiento de que cada uno de nosotros es indispensable y nadie está de más. Sin nuestras energías, el universo no sería el mismo. Reafirmo mi fe en Dios y mi confianza en la trascendencia de las personas. Si llegan a fallar los recursos de la tecnología 2, lo que queda es el ser humano entendiéndose con otros seres humanos. Y eso se logra con los lenguajes existentes de tiempos inmemoriales, que van plasmando en nuestra existencia los mensajes necesarios para cumplir con la hermosa tarea de vivir, ser felices y amar. En este planeta. Aunque haya miles de otros lugares en el universo. Y si la persona es la clave, debemos trabajar con todos y cada uno y hacia su interioridad, que es lo que le pertenece íntimamente. Y eso lo haremos con un lenguaje que sirva a todos y exprese el conocimiento acumulado de un modo coherente y sólido.


Recordemos los días en que Santiago, a finales del siglo XX, vivió cortes programados de energía eléctrica y no podíamos usar computadores ni plantas telefónicas.