Definir este fenómeno no es una tarea fácil, puesto que hasta el día de hoy no están claros sus fundamentos neurofisológicos. Entre las teorías acerca de sus bases biológicas se encuentran aquellas que lo relacionan con la asimetría cerebral , y un mayor o menor predominio de la actividad del hemisferio no dominante mientras el individuo está en trance hipnótico.
Desde el punto de vista clínico, algunas definiciones útiles de hipnosis son las siguientes:.
Puede concebirse al trance hipnótico como un estado especial de consciencia, en el cual el sujeto está más dipuesto a seguir las directivas del clínico, para explorar potenciales psicológicos, fisiológicos, psicofisiológicos y conductuales.
Puede entenderse a la hipnosis como una experiencia en la cual el individuo está más susceptible a la influencia terapéutica.
Puede definirse a la hipnosis como una condición o estado de consciencia que permite atender a los estímulos y responder a las sugestiones (sugerencias) en una forma que no es usualmente posible.
En general, cuando una persona se encuentra en estado hipnótico presenta diversos cambios :
Procesos psicofisiológicos: frecuencia cardíaca; flujo sanguíneo periférico (enrojecimiento o empalidecimiento; pestañeo y motilidad ocular: respuestas pupilares; reflejo de deglución; ritmo respiratorio; pérdida o exageración de la respuesta de sobresalto.
Comportamiento motor: latencia de respuesta; tonicidad muscular disminuida; economía de movimientos; cualidades vocales alteradas; inmovilidad del cuerpo.
Comportamiento sensorio-perceptual: relejación y comodidad; ilusiones espontáneas; fenómenos alucinatorios.
Comportamiento social: respuesta de disposición a atender al terapeuta; expectación; "sugestionabilidad" (entendida ésta como una tendencia a actuar o hacer realidad las sugerencias del hipnotista).
Comportamiento cognitivo: Sentimientos de disociación; amnesia; literalidad; ideación y fantasía autónomas; distorsión de tiempo y retraso temporal en el uso de conceptos.
Una de las características del trance que más llama la atención a los sujetos que no han experimentado amnesia del proceso de trance, es que han actuado en forma involuntaria (disociada) los fenómenos sugeridos por el terapeuta . Este es el criterio que permite diferenciar a un estado hipnótico de una relajación profunda (aunque puede llevarse a un sujeto desde el estado de relajación al de trance hipnótico).
En el estado de trance hipnótico los sujetos pueden experimentar en forma espontánea -o ser sugeridos por el terapeuta- una serie de fenómenos denomimados "fenómenos hipnóticos clásicos". Hasta el día de hoy no hay certeza de las bases neurofisiológicas de esos fenómenos.
Los fenómenos hipnóticos son los siguientes (4,9):
Las intervenciones terapéuticas hipnóticas hacen uso de estos fenómenos hipnóticos (entre otras estrategias) para suministrar experiencias terapéuticas a los pacientes.
Watzlawick, P. (1986) El lenguaje del cambio. Ed. Herder, Barcelona
Yapko, M. (1995) Essentials of Hypnosis. New York: Brunner/Mazel
Erickson, M. (1952/1980) Deep Hypnosis and Ints Induction. In E. Rossi (Ed.), The Collected Papers of Milton H. Erickson on Hypnosis, Vol. 1, New York: Irvington, p. 139-167
Erickson, M.; Rossi, E. & Rossi, S. (1976) Hypnotic Realities. New York: Irvington
Erickson, M. and Rossi, E. (1979) Hypnotherapy: An exploratory casebook. New York: Irvington
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Rossi, E. (1982) Hypnosis and Ultradian Cycles. A New State(s) Theory of Hypnosis? American Journal Clinical of Hypnosis, 25(1), 21-32