En el capítulo 2 ofreceremos un bosquejo de los elementos fundamentales de epistemología.
En el capítulo 3 definimos qué es la "epistemología cibernética". Se exponen allí los principios esenciales del pensamiento cibernético y su evolución histórica; mostraremos que muchas de 125 intelecciones básicas de la cibernética surgieron de la biología y las ciencias humanas, y justificaremos el motivo por el cual creemos que la cibernética es una ciencia adecuada para el estudio de los procesos mentales y vivientes. Además, pondremos de relieve que la cibernética, ciencia auto-correctiva en evolución, ha modificado algunas de sus primitivas tendencias reduccionistas y ha incrementado su capacidad de explicar fenómenos complejos. Este último nos llevará a examinar lo que hemos denominado "cibernética de la cibernética"
Los capítulos 2 y 3 brindan las herramientas epistemológicas necesarias para pensar cibernéticamente sobre la terapia familiar y el cambio. Tal vez sean los más difíciles del libro, y debe abordárselos como si fueran una introducción al estudio de una lengua extranjera. Su adecuada comprensión nos permitirá abordar la terapia como lo haría un especialista en la cibernética.
En los restantes capítulos se aplican estas ideas a fin de indicar como pueden discernirse las pautas cibernéticas en la terapia familiar. En el capítulo 4 se proporciona un encuadre cibernético general de las principales distinciones efectuadas en el curso de la terapia, incluidas las de sistema, patología, salud, terapeuta y ecología. Se ilustra así cómo se construye una descripción cibernética.
El cambio, tema central de la terapia familiar, es también el del capítulo 5. Aquí se nos revela la cibernética como una forma de conceptualizar la organización del cambio y la estabilidad: ella nos provee de una concepción complementaria tal que es imposible analizar uno sin analizar la otra. Gracias a este examen del cambio en ese capítulo, podremos también desenmarañar lo que efectivamente acontece en el curso de la terapia.
En el capítulo final, titulado "La estética como base de liar", la terapia familia "La terapia como base de la terapia familiar", se expone un enfoque estético para contextualizar nuestras, ideas sobre la acción terapéutica. Se esclarecen las patologías derivadas de las finalidades y manipulaciones conscientes desprovistas de principios estéticos, y se examina la relación entre técnica, práctica y arte.
Tal vez el lector note que cada capítulo es en verdad un modo distinto de decir lo mismo. Todos los caminos conducen a una epistemología idónea para la estética del cambio. Comparando los capítulos entre si e integrándolos, puede efectuarse un reconocimiento del territorio de la epistemología cibernética.
Si en lo que sigue logramos que el lector comprenda cuál es la diferencia radical entre la epistemología cibernética y nuestros modos habituales de conocer, es más probable que el mundo de la terapia pueda ser transformado. Los lectores que hayan entendido esto pueden pasar a examinar la epistemología cibernética como una manera de redescubrir la naturaleza biológica de nosotros mismos, de nuestras relaciones interpersonales y de nuestro planeta. Esta comprensión es absolutamente decisiva en el momento y lugar en que vivimos: los armamentos siguen apilándose los pueblos continúan batallando por territorios, venenos creados por el hombre ya están incorporados a nuestra progenie y la educación suele producir un saber trivial. A menudo, la sabiduría estética indispensable para salvarnos y salvar al planeta suele desecharse en favor de soluciones pragmáticas que son el fruto de la codicia y de la incomprensión biológica. Esta situación nos lleva a una sola conclusión: que gran parte de la cultura en que vivimos es insana. Algunos incluso coincidimos con Bateson (1972) cuando dice que "quizá tengamos una posibilidad del cincuenta por cierto de sortear los próximos veinte años sin que se produzca una catástrofe más que la mera destrucción de una nación o grupo de naciones, (pág. 487) [trad. cast 520] .
Pero aún quedan, esperanzas. El poeta nos recuerda que lo imperioso es comprender nuestra propia naturaleza; la epistemología cibernética será un mundo para ello. En las palabras de T. S. Eliot, este percatamíento requiere
"Una condición de simplicidad completa
(cuyo precio es la totalidad, ni más ni menos)
y todos estaremos bien..." (1943/1973, pág. 59).
Ser terapeuta requiere ni más ni menos que eso.
[i] La "psilocibina" es una de las sustancias químicas aisladas, por los doctores Albert Hofman Arthur Brack y Hans Kobel a partir de los hongos alucinógenos que Gordon Wasson recogió en Méjico de manos de la curandera (o sabia) mazateca María Sabina; véase Álvaro Estrada, Vida de María Sabina, la sabia de los hongos, Méjico, Buenos Aires, Siglo XXI, 5ª ed. 1984. [T.]