Los bebedores de vino, ahora tienen más razones para consumirlo. A los ya conocidos efectos sobre el sistema cardio-vascular, se agregan ahora positivas consecuencias en la prevención del cáncer
La Asociación Americana del Cáncer cree que el consumo moderado de vino reduce en un 20% la mortalidad por cáncer. De acuerdo investigaciones los componentes fenólicos (resveratrol y quercetina) de esta bebida son anti-oxidantes. La Fundación para la Investigación y Nutrición del Vino ha señalado que el proceso oxidativo es la principal causa del inicio de los tumores y los estudios muestran los componentes del vino reducen el daño oxidativo en el ADN.
Los efectos quimioprotectores del vino, actúan ante diversos de tumores. En el cáncer de mama, según investigadores de la Boston University School of Medicine, el resveratrol podría tener efectos antiestrogénicos bloqueando el efecto cancerígeno de estos. El consumo moderado de vino en posmenopáusicas es también beneficioso frente a enfermedades cardiovasculares.
En los hombres, el resveratrol es favorable en la reducción del riesgo de cáncer de próstata, el más común entre ellos y el segundo con mayor índice de mortalidad a nivel mundial.
Sin embargo, según indican los expertos, uno de los factores que más influye en la prevención de cáncer es una dieta sana y equilibrada junto a un estilo de vida sano.