Los frutos (badiana de la China o anís estrellado).
Abundante aceite esencial (5-8%): anetol (80-90%), trans-anetol, monoterpenos (felandreno, limoneno, alfa-pineno, linalol), aldehidos y cetonas anísicas, cineol, estragol y safrol.
El fruto desecado debe de contener al menos 70 mg/Kg de aceite esencial (R.F.A., 1997).
El aceite esencial determina una acción aperitiva, carminativa, eupéptica, espasmolítica, antiséptica, antidiarréica, expectorante, emenagoga y galactógena. Se usa bastante como corrector organoléptico de olor y de sabor. En uso externo es parasiticida.
Inapetencia, dispepsias hiposecretoras, gastroenteritis, flatulencia, espasmos gastrointestinales. Catarros, bronquitis. En uso tópico: pediculosis.
Embarazo, lactancia, hiperestrogenismo.
No prescribir formas de dosificación con contenido alcohólico a niños menores de dos años ni a consultantes en proceso de deshabituación etílica.
A dosis elevadas, el aceite esencial puede resultar tóxico, con efectos narcóticos, delirio, anestesia y convulsiones.
Existe un grave peligro de intoxicación si se produce una falsificación del anís estrellado por otra especie: Illicium religiosum (badiana del Japón), rica en alcaloides tóxicos (shikimina, shikimitoxina), con acción estupefaciente y cardiotóxica. Ya que la distinción entre ambas especies*incluso macroscópica- es bastante fácil, el farmacéutico deberá comprobar que no existe adulteración: en Europa se considera poco frecuente (Wichtl), sin embargo en España, quizás debido a menores controles de calidad, la adulteración se describe como bastante habitual (Peris, 1995; Mulet, 1997).
Tener en cuenta el contenido alcohólico del extracto fluido y de la tintura.
* Infusión (frutos): 1 g/taza. Una taza después de las comidas.
* Polvo: 1-2 g/día, en cápsulas de 300 mg.
* Extracto fluido (1:1): 10-30 gotas, una a tres veces al día.
* Tintura (1:5): 30 a 60 gotas, una a tres veces al día.
* Extracto seco (5:1): 100 a 300 mg/día.