Por Ximena Santa Cruz Bolívar
¿Podemos Recuperar el Sentido de la Navidad?
¿Es Posible una Navidad sin Regalos Excesivos?
El Día de la Celebración de la Navidad
Una vez una tía que vivía en Inglaterra envió un calendario que comenzaba el 1º de Diciembre diciembre en el cual se debía abrir cada día una ventanita de una casa navideña, por supuesto con imágenes invernales.
Creo que ese hito marcó muy claramente la concepción de un proceso de preparación para el encuentro y la celebración de un espacio de vida y conexión con los otros que culminaba con la entrega de regalos que "el Viejito Pascuero" dejaba secretamente la noche del 24 de Diciembre y que descubriríamos y abriríamos juntos como familia en la mañana del 25 de Diciembre.
La imagen de las ventanitas con mensajes de amor y solidaridad, que me traducían del inglés o que yo lograba descifrar desde el francés en años siguientes, era un símbolo de trascendencia que yo asociaba a una música maravillosa de villancicos y oratorios de Navidad de Bach y a estar largas tardes en familia compartiendo un espacio común cada uno en sus actividades de creación y conexión personal.
Es cierto el mundo era otro, todavía creíamos en muchas utopías y en una manera de ver a los seres humanos más gregariamente y la población mundial no agotaba los recursos naturales, ni existía Internet, y la televisión tenía pocos canales para ver y casi ni había programas para niños.