Esta enfermedad corriente se produce cuando hay una excesiva «irritabilidad» o «reactividad» en las vías bronquiales, lo que provoca la constricción de los músculos bronquiales y en consecuencia respiración sibilante y dificultad para respirar. Relacionada a menudo con la alergia, también se precipita con la infección y puede ser un trastorno muy grave. Los tratamientos convencionales intentan controlar la «irritabilidad» con medicamentos de cortisona y con broncodilatadores para bloquear la constricción. Entre los remedios homeopáticos más utilizados para tratar el asma están los siguientes:
Arsenicum albura (óxido blanco de arsénico): el ataque se produce en las horas siguientes a la medianoche, especialmente hacia las 2.00 horas. El paciente se muestra muy ansioso y temeroso y necesita tener a alguien cerca. Suelen aparecer fatiga y debilidad, pero también un desasosiego que induce a levantarse de la cama, sentarse en una silla, luego en un sofá, para volver de nuevo a la cama, etc.
Kali carbonicum (carbonato de potasio): el ataque se suele producir entre las 2.00 y las 4.00 horas. Es imposible permanecer acostado y el paciente tiene que estar incorporado y posiblemente inclinado hacia delante. No se mueve y se siente mejor cuando está quieto. Se siente incómodo con las corrientes de aire y suele tener escalofríos. No experimenta tanto temor y ansiedad como con el Arsenicum.
Natrum sulphuricum (sulfato de sodio): el ataque se produce hacia las 4.00 o las 5.00 horas y es peor con el tiempo caluroso y húmedo del verano o en invierno, con el cambio a un aire más cálido y húmedo. La tos suele ser suelta y estar acompañada de expectoración, que puede ser verdosa.
Cuprum metallicum (cobre): ataques espasmódicos, violentos y repentinos, con tos sofocante, frecuentemente acompañados por rechinar de dientes, apretar los pulgares y calambres de los dedos y otros músculos.
Sambucus niger (saúco negro): ataques nocturnos repentinos durante el sueño; el paciente tiene que saltar de la cama y agarrarse el cuello. Podría boquear para respirar y su piel volverse azulada (cianosis). El ataque remite, pero reaparece durante el siguiente sueño, y así sucesivamente.