Enrique de Villena (1384-1434) Nieto ilegítimo del rey Enrique II de Castilla, y descendiente directo de los marqueses de Villena, cuyo título no llegó a conseguir. Educado por su abuelo, don Alonso, mantuvo durante toda su vida una relación conflictiva con la corte castellana, en parte por la originalidad de sus inclinaciones y por su talento.
Gran amante de las ciencias ocultas, practicó la alquimia*, la astrología* y la magia*.
Pero, además de estas profundas aficiones, Villena fue un erudito de consideración que tradujo al castellano distintas obras clásicas, entre ellas La divina comedia.
A su muerte, el rey de Castilla, Juan II, mandó quemar su biblioteca y sus escritos, dada la fama de brujo que le había marcado en vida.
Por fortuna pudieron salvarse algunas de sus obra. entre las que se encuentran algunos escritotos sobre el mal de ojo*, sobre astrología y, la más famosa de todas, su Arte cisoria, un curioso tratado sobre el buen comportamiento en la mesa.
Término asociada a la astrología o astronomía.