Son éstas:
1) Las penalidades de la existencia evolucionaria que acaban en nacimientos y muertes, vida tras vida;
2) La causa productora de sufrimiento, que es el deseo egoísta siempre renovado de satisfacerse uno mismo, sin poder jamás conseguir tal fin;
3) La destrucción de aquel deseo, o el apartarse uno mismo de él, y
4) El medio de obtener dicha destrucción.
(Olcott, Catecismo Búdico, Preg. 121).
Expresión usada en budismo y sus tradiciones.