Entre los egipcios y los indos era el símbolo del Logos.
En filosofía esotérica es el Espíritu que vivifica la Naturaleza creadora, o sea el Espíritu Santo.
(Doctrina Secreta, II, 436); simboliza el poder generador de la Naturaleza.
Es también el símbolo más sagrado de la quinta Raza (Id., II, 562), y lo es asimismo del número 1 y de la primera letra del alfabeto hebreo, Aleph (Id., II, 582).
Según leemos en el Dict. D'Arch. Egypt., el Toro servía para simbolizar el papel de macho en el acto de la generación.
Para expresar que el sol se sucede a sí mismo en sus diversas fases, los egipcios decían que se engendra, y expresaban esta idea por medio de una enérgica imagen llamándolo "fecundador (o toro) de su madre".
Esta imagen está materializada por la forma itifálica del dios Khem.
El Toro es uno de los cuatro Animales sagrados.
(Véase: Los Cuatro Animales Sagrados; véase también: Apis, Tauro, Richabha, Vaca y Zodíaco).
Símbolos o conceptos simbólicos utilizado en esoterismo o religiones.