Secta rusa fundada en el año 1757 en el seno de los Flagelantes, por los miembros más fanáticos que llegaban hasta la castración.
A partir de 1771 se comienza a hablar de una forma más oficial de los "castrados". El zar Alejandro I recibió al jefe de la secta, Selianor, consiguiendo que los nobles rusos se interesaran por ellos.
Durante la etapa de brillo y esplendor los discípulos de Selianor le instalaron en una magnífica casa a la que llamaron "Casa de Dios" o "Sion Celestial". Posteriormente fue recluido por orden del gobierno en el monasterio de Suzdal. Pero el movimiento continuó, hasta el punto de que el zar Nicolás tomó severas medidas contra ellos.
Centenares de skoptisi fueron detenidos y deportados a Siberia, otros se refugiaron en la zona de los Balcanes, donde aun en pleno siglo XX continuaba con sus prácticas.
Los sábados por la noche llevaban a cabo la ceremonia fundamental de la secta. Hombres y mujeres dirigidos por los profetas, los jefes de la secta, cantaban himnos, dejándose llevar por un ritmo infernal que les hacía danzar frenéticamente.
Los miembros de la comunidad prometían antes de ser castrados, llegar al Redentor y mantener en secreto todo lo que estaba relacionado con el orden interno de la secta. Incluso afirmaban estar dispuestos a sufrir persecución, condena y tormento, antes que revelar sus doctrinas.
Expresión asociada a sectas o movimientos sectarios.