(Caldeo). Según Beroso, es el último de los diez reyes de la dinastía de los reyes divinos, y el "Noé" caldeo.
Así como Vishnú pronostica el próximo diluvio a Vaivasvata Manú, y previniéndole, le ordena fabricar un arca, en la cual se salvan él y siete Richis, así también el dios Hea pronostica lo mismo a Sisithrus (o Xisuthrus), ordenándole preparar una nave y salvarse él con unos pocos escogidos.
Continuando con la serie, casi 800.000 años más tarde, el Señor Dios de Israel repite el aviso a Noé.
¿Cuál es el primero, pues? La historia de Xisuthrus, descifrada poco ha de las tablas asirias, viene a corroborar lo que del Diluvio caldeo dijeron Beroso, Apolodoro, Abideno, etc., etc.
(Véase tabla 11, en el Relato del Génesis Caldeo de G. Smith, págs. 263 y siguientes).
Esta tabla 11ra., comprende todos los puntos tratados en los capítulos VI y VII del Génesis: los dioses, los pecados de los hombres, la orden de construir un arca, el Diluvio, la destrucción del linaje humano, la paloma y el cuervo despedidos del arca y, por último, el Monte de Salvación en Armenia (Nizir-Ararat); todo está allí.
Las palabras "el dios Hea oyó, y su hígado se encolerizó, porque sus hombres habían corrompido su pureza", y la historia de la destrucción de toda su simiente fueron grabadas en tablas de piedra muchos millares de años antes de que los asirios las reprodujeran en sus ladrillos cocidos, y aun éstos, con toda seguridad, son anteriores al Pentateuco, "escrito de memoria" por Esdras, apenas cuatro siglos antes de JC [Véase: Diluvio.]
Concepto utilizado en el judaísmo o, cábala