Los asiriólogos, los egiptólogos y los orientalistas en general prueban que el lugar en cuestión existía en todos los templos de la antigüedad.
El gran templo de Bel-Merodach, cuyos lados miraban a los cuatro puntos cardinales, tenía en su último extremo un "Santo de los santos" oculto por un velo a la vista de los profanos; allí, "al principio del año se sienta el divino rey del cielo y de la tierra, el señor de los cielos".
Según Herodoto, había allí la imagen de oro del dios con una mesa también de oro enfrente, como la mesa hebrea de los panes de la proposición, y sobre la cual parece haber sido colocado alimento.
En algunos templos había asimismo "un pequeño cofre o arca con dos tablas grabadas de piedra en él." (Myer, Qabbalah).
En suma, está ahora bastante bien probado que el "pueblo elegido" no tenía ninguna cosa original propia, sino que todos los detalles de sus ritos y religión habían sido copiados de otras naciones más antiguas.
Las Hibbert Lectures del profesor Sayce y otros prueban esto de sobra.
La historia del nacimiento de Moisés es la de Sargón, el babilonio, que precedió a Moisés unos dos mil años; y no es de extrañar, como nos dice el doctor Sayce, que el nombre de Moisés, Mosheh, tenga relación con el nombre del dios-sol babilónico como el "héroe" o "jefe". (Hib. Lect., páginas 46 y siguientes).
"Las clases sacerdotales -dice Mr. J. Myer- estaban divididas en sumos sacerdotes, los adictos o ligados a ciertas divinidades, como los levitas hebreos; ungidores o purificadores; los kali, "ilustres" o "ancianos"; los adivinos, y el Makhkhu o "Grande", en el cual el profesor Delitzch ve al Rab-mag [Jefe de los magos] del Antiguo Testamento" Los acadios y los caldeos guardaban un sábado o día de descanso cada siete días; tenían también días de acción de gracias, y días para la mortificación y oración; había sacrificios de vegetales y animales, de carnes y vino" El número siete era especialmente sagrado" El gran templo de Babilonia existía mucho antes del año 2250 antes de nuestra era.
Su "Santo de los Santos" estaba dentro del santuario de Nebo, el profético dios de la Sabiduría".
De los acadios, el dios Mardak pasó a los asirios, habiendo sido antes Merodach, "el misericordioso", de los babilonios, único hijo e intérprete de la voluntad de Ea o Hea, la gran Deidad de la Sabiduría.
En una palabra, los asiriólogos han quitado el velo a todo el sistema del "pueblo escogido".
Voz asociada con religión y religiones antiguas.