Himnos religiosos que forman parte del Antiguo Testamento de la Biblia.
Forman un libro de oración de los judíos y del Cristianismo.
Son de distinto tipo, de alabanza, de acción de gracias, de lamentación, penitencia, de maldición..., incluso hay algunos que son interpretados en un sentido mesiánico.
De los 150 que componen el llamado Libro de los Salmos o simplemente Los Salmos, medio centenar son de autor anónimo, y el resto se atribuyen a David.
"Feliz el que no acude al consejo de los malos ni se entretiene en el camino de los pecadores, ni se sienta en el banco de los que se ríen; sino que pone su gozo en la ley de Yavé, y día y noche la medita.
Es como un árbol plantado a orillas de las aguas que da el fruto a su tiempo,
y cuyas hojas no se quedan mustias,
pues todo lo que hace sale bien.
No son así los malos, no,
sino que ellos, como la paja que se lleva el viento;
no, no se alzarán en el juicio de los malos, ni los pecadores en la asamblea de los buenos.
Porque Yavé vela por el camino de los buenos, pero el camino de los malos va a la perdición".
(Salmo 1: Buenos y Malos).
Concepto utilizado en el judaísmo o, cábala