Nombre simbólico del fundador de la Orden Rosacruz, que apareció en Europa en el siglo XIV para comenzar el trabajo de espiritualizar la ciencia y hacer científica la religión, dando luz sobre malentendido cristianismo y el misterio de la vida y el ser.
Muchas centurias han transcurrido desde su encarnación y muchos han considerado su existencia como un mito.
Pero su nacimiento, como Christian Rosenkreutz, ha marcado el principio de una nueva época de vida espiritual en el mundo occidental.
Ese Ego particular, ha estado en continuas existencias físicas desde entonces, en uno u otro de los países europeos.
Tomaba un cuerpo nuevo cada vez que sus sucesivos vehículos habían perdido su utilidad, o si las circunstancias hacían necesario que cambiara el campo de sus actividades.
Aún más, hoy en día está encarnado, siendo un Iniciado de grado superior, potente y activo factor en los asuntos del Occidente, si bien desconocido para el mundo.
Término utilizado en esoterismo, espiritualidad o, en el movimiento rosacruz.