A pesar de la inmensa diversidad que ofrecen desde el punto de vista exterior, todas las religiones tienen un fondo común en ideas dogmáticas, filosóficas y morales.
En efecto, el estudio comparado de las religiones demuestra que las enseñanzas fundamentales acerca de la Divinidad, del hombre, del universo, de la vida futura, son substancialmente idénticas en todas ellas, a pesar de su diversidad aparente.
Son las mismas verdades cubiertas por el velo propio de las religiones exotéricas que las desfigura en parte.
Es como una luz blanca encerrada en un farol que tiene en cada uno de sus lados un vidrio de color diferente, y según sea el lado desde donde se mira, parece roja, azul, verde o amarilla; quítense los cristales, y todo el mundo verá la misma luz en su puro color natural.
Este fondo común de todas las religiones dignas de este nombre se explica porque todas ellas dimanan de la Gran Fraternidad de Instructores espirituales, que transmitieron a los pueblos y razas las verdades fundamentales de la religión bajo la forma más apropiada a las necesidades de aquellos que debían recibirlas, así como a las circunstancias de lugar y tiempo.
Por esto se ha dicho no sin fundamento que la cuestión religiosa es principalmente una cuestión geográfica; así, uno es musulmán sencillamente porque ha nacido en Arabia; católico, porque vio la primera luz en España, etc.
En su misión sublime, los excelsos fundadores de religiones fueron ayudados por cierto número de individuos iniciados y discípulos de grados diversos, hombres eminentes por su saber y sus relevantes dotes morales.
-Otra causa poderosa de antagonismo entre los que profesan diferentes credos religiosos son las corrupciones introducidas por sus representantes, que los modifican y cambian a su antojo, impulsados generalmente por móviles interesados y egoístas.
-Véase: Esotérico y Exotérico.
Concepto propio de los masones, masonería.