Término usado para denotar que hemos vivido antes de la vida presente. Equivale a la reencarnación en lo pasado.
Esta idea es objeto de burla por parte de unos; es rechazada por otros, y calificada de absurda e irracional por algunos más. No obstante, es la creencia más antigua y más universalmente admitida desde una antigüedad inmemorial.
Y si esta creencia era universalmente aceptada por las más sutiles inteligencias filosóficas del mundo precristiano, seguramente no está fuera de lugar que algunos de nuestros modernos intelectuales crean también en ella, o por lo menos concedan a dicha doctrina el beneficio de la duda.
La misma Biblia hace más de una vez alusiones a ella, como cuando San Juan Bautista es considerado como la reencarnación de Elías, y los discípulos de Jesús, al preguntar si el hombre ciego había nacido ciego a causa de sus pecados, lo cual equivale a decir que había vivido y pecado antes de nacer ciego.
Como dice muy acertadamente Mr. Bonwick, era "la obra de progreso espiritual y de disciplina del alma.
El sibarita sensualista se volvía pordiosero; el soberbio opresor, esclavo; la egoísta mujer a la moda, una costurera.
Una vuelta de la rueda daba ocasión para el desenvolvimiento de una inteligencia y sentimientos descuidados o corrompidos, y de ahí la popularidad de la reencarnación en todos los países y en todos los tiempos" De esta suerte la expurgación del mal se efectuaba de un modo gradual, pero seguro".
Verdaderamente, "una mala obra sigue al hombre pasando por cien mil transmigraciones" (Pañchatantra).
"Todas las almas tienen un vehículo sutil, imagen del cuerpo que conduce la pasiva alma de una mansión material a otra", dice Kapila; así como Basnage dice, hablando de los judíos: "Por esta segunda muerte no se entiende el infierno, sino lo que ocurre cuando un alma ha animado por segunda vez un cuerpo".
Heródoto dice que los egipcios "son los primeros que han hablado de esta doctrina, según la cual el alma del hombre es inmortal, y después de la destrucción del cuerpo, entra en un ser nuevamente nacido. Cuando, según dicen, ha pasado por todos los animales de la tierra y del mar y de todas las aves, volverá a entrar en el cuerpo de un hombre nacido de nuevo".
Esto es la preexistencia.
Deveri demostró que los libros funerarios de los egipcios dicen claramente: "la resurrección no era en realidad otra cosa que una renovación, que conducía a una nueva infancia y a una nueva juventud".
(Véase: Reencarnación).
Voz asociada con religión y religiones antiguas.