Japonesa de la isla de Hondo perteneciente a la secta jodo que en 1838 y a la edad de cuarenta años, afirmó estar poseída por el Espíritu, dedicándose hasta su muerte en 1888 a practicar curaciones milagrosas.
En 1872 fundó la Tenri Kyo o Doctrina del Espíritu Santo, que se presenta como una conjunción del mesianismo budista y el mesianismo sintoísta, así como de la espera del Espíritu, que es en realidad el dueño del Universo, la única raíz del sufrimiento y el gozo, de la enfermedad y la salud.
No es justiciero, ya que ni recompensa ni castiga, sino que reparte con entera libertad.
Una libertad que el hombre sólo puede igualar cuando se somete por entero a él.
Concepto asociado al Japón, cultura historia o religión sintoísta