Movimiento que aparece al negarse una parte de los seguidores de Alí a aceptar la propuesta de Moavia de que "no hay más juicio que el de Dios".
Afirman que no se puede justificar la conducta de los fieles por la fe, sino que son necesarias las obras, es decir que el que comete un pecado grave deja de ser creyente, concepto puritano que también se muestra en la perdida de la pureza legal.
Pertenecen a este movimientos los ibaditas, sufristas y asraquitas.
Corresponde al islamismo y la cultura árabe.