La metafísica griega exigía que la naturaleza divina por ser eterna y perfecta, no pudiera sufrir en forma alguna, ya que el dolor implica cambio e imperfección.
Los primeros teólogos cristianos aceptaron el principio de la impasibilidad de Dios, de lo que surgió un constante problema entre la teología griega y la hebrea.
Término relacionado con el cristianismo, gnósticos, la Biblia, cristianismo esotérico.