Símbolos o conceptos simbólicos utilizado en esoterismo o religiones.
Sistema filosófico que presupone el conflicto existente entre dos principios irreconciliables.
Las religiones de los Maniqueos* y de los gnósticos* estaban basadas en este sistema moral.
El simbolismo dualista es muy abundante, destacando en él, y a nivel histórico, los dos elementos que como atributo llevaban los faraones: el cayado y el látigo, que representaban la ganadería y la agricultura.
En el hermetismo cabalístico se encuentran también las dos columnas del templo salomónico: Jakin y Bohaz que representan la Misericordia y el Rigor.
En numerosas religiones y movimientos sectarios existe la creencia de una doble divinidad, la del bien y la del mal, lo que da origen a una dualidad curiosa.
Quizás uno de los casos más claros sea la religión impulsada por Zoroastro, con el enfrentamiento de Ormuz y Ahrimán; así como el desarrollo de los elementos maniqueos que alcanzaron su máximo esplendor en Occidente con el movimiento cátaro.
Son dualistas los sistemas que retrotraen todo lo existente a dos principios primordiales contrapuestos, bien sea de polaridad (los cielos y la tierra, lo masculino y lo femenino, como por ejemplo el yin y el yang de los chinos), o como potencias o divinidades enemigas (la luz y las tinieblas, el bien y el mal, lavida y la muerte).