CÁTAROS

CÁTAROS

Bajo este nombre se incluyen en una serie de movimientos cristianos que durante el siglo XII extendieron su influencia por toda Europa: valdenses, albigenses, bogomilos, zetrobusianos, pobres de Lyon, circuiters, caropiti.

La doctrina cátara mantiene como punto principal su fe en el dualismo como doble principio universal.

Aunque se ha buscado su origen en Bulgaria, lo cierto es que su importancia data del Languedoc y Occitania (Francia).

Defendían a transmigración de las almas aceptando la inspiración gnóstica que atribuye al hombre tres naturalezas: cuerpo, alma y espíritu.

Rechazan los sacramentos del cristianismo romano, se oponían la Iglesia a la vez que al Estado, sobre todo a la forma de llevar el culto desde Roma y a la fastuosidad con que los obispos y sacerdotes vestían.

Practicaban un ascetismo muy severo. No mataban, ni juraban, ni mentían, ni se unían a mujer alguna.

Se abstenían de comer carne, huevos y queso. Practicaban el don de la consolación, que tanto representaba el bautismo como la extremaunción.

La Luz y las Tinieblas son los dos principios antagónicos por naturaleza. Tras una catástrofe cósmica una parte de la Luz quedó atrapada en las Tinieblas. Este mundo está bajo el dominio de Satán, por lo que el alma permanece bajo su dominio hasta que no se una a Cristo y reciba el beneficio de la luminosidad salvadora. En el catarismo hay que diferenciar a los creyentes de los perfectos. Los primeros eran los que debían seguir la fe cátara, pero no estaban obligados a mantener la norma estricta, mientras que los segundos debían respetar la doctrina por encima de todo.

El Papa Inocencio III convocó una cruzada contra los cátaros a principios del siglo XIII poniendo al frente del ejército al abad cisterciense Arnaldo de Amalric y al caballero Simon de Monfort.

La crueldad conque se llevó a cabo esta serie de batallas desprestigió los deseos papales, derivando en una guerra de un sadismo exacerbado. Prueba de ello son las palabras pronunciadas por Amalric en la toma de la ciudad de Beziers que han pasado a la historia como signo de la barbarie cometida por esos supuestos "Caballeros de Dios":

"Matarlos a todos que Dios en el Cielo distinguirá a los suyos de los otros".

Los cruzados tomaron sucesivamente las diversas ciudades y castillos que componían los feudos, vizcondados y condados occitanos (Carcasona, Tolosa, Laveur...) derrotando al conde de Tolosa Raimundo VI y a su aliado el rey Pedro II de Aragón en la batalla de Muret (localidad próxima a Tolosa).

La Inquisición se hizo entonces dueña y señora de las tierras francesas obligando a los cataras a emigrar o refugiarse en las zonas altas pirinaícas, pasándose de una guerra religiosa a una guerra política al enviar tropas Francia para integrar esa zona del sur en su reino.

El gran símbolo del catarismo y último baluarte, el castillo de Montsegur, cayó en manos francesas el año 1244.

Símbolos o conceptos simbólicos utilizado en esoterismo o religiones.