La masonería que tiene en sus antecesores las ordenes de constructores de la Edad Media, una vez que devino en masonería especulativa, usa profusamente la metáfora de Arquitecto para significar que sus miembros se dedican a la construcción de un templo interior, aludiendo con esto a la transformación y desarrollo espiritual.
El Gran Arquitecto del Universo o GADU, es la solución para que personas de diferentes credos religiosos o agnósticos puedan coexistir dentro de la orden masónica.
En los grados 29º y 30º del Rito Francés y los cuatro siguientes (31º, 32º y 33º) del Rito Escocés Antiguo y Aceptado se identifica al GADU (Gran Arquitecto Del Universo) con el Lucifer del Humanismo y la Ilustración. Los masones de estos grados veneran a Lucifer, con este nombre, o con el de Baphomet (en una alusión a los templarios), identificándolo con la luz de la razon esclarecida.
Algunos movimientos para masónicos dan el título de Gran Arquitecto a un demonio sujeto a Satanás, al que se representa como una potencia reproductora con un gran miembro viril.
Símbolos o conceptos simbólicos utilizado en esoterismo o religiones.